La Autovia de Aragon atraviesa, a lo largo de 300 km terrenos muy diversos. En la zona de Medinaceli la Autovia se ha apoyado, parcialmente, sobre laderas de arcillas del Keuper y sobre los fangos muy blandos, del Rio Jalon que, en esa zona, llegan a alcanzar 40 m de espesor. La construccion de la Autovia en esa zona presentaba dos condicionantes importantes: La inestabilidad de las laderas del Keuper y la enorme deformabilidad y muy baja resistencia de los fangos del Rio Jalon. Por esos motivos, despues de una optimizacion del trazado (en planta y alzado), se disenaron una serie de soluciones que redujeran los desmontes en el Keuper y que reforzaran el terreno en varias de las vaguadas con fangos que debia atravesar la Autovia. Para conseguir asegurar la estabilidad transversal de los terraplenes, uniformizar sus asientos, y acelerar su evolucion se han utilizado columnas de grava, por via humeda, con una longitud del orden de 6 m, flotando en el fango. En algun caso, con terraplenes, de 12 m de altura, las columnas atravesaron todo el fango. La instrumentacion realizada ha permitido controlar debidamente la obra y su puesta en servicio. Titulo en frances: "Projet d'une chaussee rigide dans une route construite sur des limons compressibles".
Samenvatting